Hispania. Revista Española de Historia 84 (276)
ISSN-L: 0018-2141, eISSN: 1988-8368
https://doi.org/10.3989/hispania.2024.015

Gaspar Celaya, Diego. 2022. Banda de Cosacos. Historia y memoria de la Nueve y sus hombres. Madrid: Marcial Pons. 416 págs. ISBN: 978-84-1-666-2302.

 

Después del libro basado en su tesis doctoral La guerra continúa. Voluntarios españoles al servicio de la Francia libre. 1940-1945 (2015), y profundizando en la vía abierta en el artículo “D’un mythe à l’autre. Mémoire et histoire des Espagnols dans la résistance” (2017), Diego Gaspar Celaya recorre en esta obra la trayectoria de los españoles de la Nueve desde la Guerra Civil hasta la posguerra mundial.

Reconociendo su deuda con Evelyn Mesquida (p. 37), aunque no la recoge en la bibliografía mientras figuran en ella otros periodistas, Celaya aporta su contribución de historiador de oficio superando la leyenda que crearon dichos periodistas al elaborar, en reacción al olvido que sufrieron, un contramito tan alejado de los hechos como el mito gaullista. Esta labor de valoración del papel efectivo de los españoles en esta compañía fue posible con el cotejo de todas las fuentes disponibles en Francia, en especial los archivos militares como los de la Legión, de Ultramar, y del Ejército.

Estos combatientes, al principio sepultados bajo las necesidades del mito gaullista de la Resistencia francesa, fueron a partir del decenio 2000 objeto de un contramito, no exento de falsificaciones (evocadas en las pp. 268 y 281; también con la fotografía del half-track “Guadalajara” evocada por Robert Coale en su epílogo, pp. 344-345), que convertía a estos valientes en los libertadores de París.

La introducción del libro no se detiene sobre las posibles explicaciones al silenciamiento por el gaullismo de la participación extranjera. En Francia, fueron una ínfima minoría, en torno al 1 % de los ciudadanos, los que decidieron resistir al invasor desde la primera hora. Hubo que esperar a 1956 y al libro Nuit et brouillard de Alain Resnais, censurado por mostrar a un gendarme francés en el campo de Pithiviers, luego a la obra Le chagrin et la pitié de Marcel Ophuls (1969), para que se empezara a asumir que la inmensa mayoría de la gente estaba dispuesta a colaborar activamente o pasivamente con los ocupantes alemanes, con tal de no tener problemas. La serie Un village français, difundida entre 2009 y 2017, sigue la veta abierta por Ophuls, mostrando a personajes diversos movidos, en su mayoría, por su interés a corto plazo.

El autor menciona la tradición gaullista. Sin embargo, en la cultura y los medios afines al Partido Comunista francés, muy influyente en la postguerra, con más del 25 % de los votos en las elecciones generales entre 1945 y 1956, se hablaba mucho de los extranjeros en la resistencia, como se puede ver en el poema de Louis Aragon, “L’Affiche rouge” (1956), que cantaban los intérpretes comunistas. A los comunistas, a menudo aliados con los gaullistas por méritos comunes en actos de resistencia, les correspondía el reconocimiento de los extranjeros; a los gaullistas la heroicización de los resistentes de primera hora.

El volumen está dividido en nueve capítulos, ordenados de forma cronológica, desde la Retirada republicana hasta la inmediata postguerra en Europa, pasando por las etapas del ingreso —a menudo forzado— en la Legión extranjera, la incorporación al puñado de franceses libres, la guerra desde la base trasera de África, y la liberación de Francia posterior al Desembarco en Normandía del 6 de junio de 1944. Cada capítulo viene introducido por un repaso histórico de gran utilidad para una persona no versada en estos temas. Este libro es un libro de referencia para quien necesite buscar información sobre los elementos de la Nueve, con una lista exhaustiva, un índice onomástico y las fotografías de identidad.

Para este trabajo, el autor ha rastreado archivos y memorias de los oficiales franceses como Raymond Dronne que estuvo al frente de la Nueve, para reconstruir, en la medida de lo posible, el recorrido de cada soldado, sus motivaciones, su trayectoria geográfica, o sus relaciones interpersonales y con el mando. Más tarde, se estudian diferentes parámetros: sus propósitos; su condición familiar; su procedencia geográfica y social; los aspectos extra-bélicos como la delincuencia y la prostitución; o su papel en el blanqueamiento de las tropas del mariscal Leclerc, cuando los españoles sustituyeron a combatientes negros para pisar como liberadores el suelo de la metrópoli. Celaya intenta asimismo explorar si la composición de la Nueve reflejaba la composición regional y social de la España de 1936, advirtiendo la presencia de una gran proporción de habitantes de ciudades, pero de regiones rurales como Andalucía. Investiga igualmente su formación, en la que resalta la diferencia entre el oficio declarado, manual, y el oficio real difícil de identificar.

A medida que fue pasando el tiempo, y conforme aumentaban las bajas, la proporción de voluntarios franceses se fue incrementando. Frente al mito de una “Nueve” española, el libro muestra perfectamente cómo esta compañía, al principio compuesta en efecto por una mayoría de españoles, se terminó convirtió en una compañía transnacional.